Fomentar la confianza corporal en los más pequeños de casa también forma parte de esa educación de la que los padres y familiares somos responsables.
Y es necesario empezar con ello desde los primeros años de vida, pues algunas investigaciones señalan que los niños de hasta 3 años pueden tener problemas con su imagen corporal.
La socialización es un proceso que comienza en la infancia, siendo inherente al desarrollo físico, psicológico y social que tienen los niños desde que nacen.
Es en dicho proceso donde comienzan a adquirir y asumir las normas socialmente compartidas entre las que se encuentran los ideales de belleza establecidos y aceptados por la mayoría. Se aprehenden a partir de los diferentes canales de socialización como los medios de comunicación, la familia o la escuela, y pueden afectar significativamente su autoestima.
En este artículo te contamos por qué es necesario fomentar la confianza corporal en nuestros niños y algunos consejos para facilitar este proceso.
Confianza corporal en los niños ¿Por qué es necesario fomentarla?
Raquel Lobatón, en su artículo ‘Criando niñxs segurxs con sus cuerpos’, señala las siguientes estadísticas extraídas de diferentes estudios.
- El 50% de las niñas menores de 13 años, y el 80% de las menores de 17, no se encuentran a gusto con su cuerpo.
- El 25% de los varones niños y adolescentes están preocupados porque no tienen mucha musculatura.
- El 80% de las niñas menores de 10 años ya han hecho algún tipo de dieta.
- Más de la mitad de las niñas y un tercio de los varones quisieran ser más delgados.
Estas cifras revelan la gravedad de la situación con respecto a los bajos niveles de autoestima que tienen niños y adolescentes en etapas muy tempranas de su vida, que marcarán su personalidad y el cómo se perciben, para siempre.
La baja autoestima en esta edad puede generar ansiedad, depresión, y lo que es peor, una relación poco saludable con la comida que probablemente lo acompañe por el resto de su vida.
Todo ello ocurre producto de los continuos mensajes de que bombardean a niños y niñas en casi todos los ambientes de socialización en los que se desenvuelven. Desde los ideales de belleza que proyectan los animados de Disney, hasta las lamentaciones que escucha de su padre o madre porque ha ganado peso en las últimas Navidades.
Estas ideas van haciendo mella en la forma en que los menores perciben su cuerpo y el de los demás, provocando inseguridades por la idea de que siendo flacos tendrán éxito y serán muy queridos por las personas que le rodean.
Como ves, la gordofobia y en general, el rechazo a los cuerpos diferentes de la norma establecida, están presentes en todas las esferas de la sociedad. Por ello, se hace muy complicado proteger a tus hijos de estos mensajes.
Sin embargo, existen algunas pautas que pueden ayudarles a construir esa confianza corporal que necesitan. Y lo mejor es hacerlos desde edades tempranas, cuando las lecciones de vida se pueden aprehender con mayor facilidad.
¿Cómo fomentar la confianza corporal desde la infancia?
El primer consejo que debes tener claro es comenzar cuanto antes. Recuerda que existen estudios que demuestran que hasta niños de 3 años se preocupan por estar ‘gordos’.
Comenzando con este tip, a continuación, te cuento el resto de pautas que puedes seguir para contribuir a que tus hijos se sientan a gusto con su cuerpo.
1. Sé ejemplo
Los niños adquieren patrones de comportamiento a partir de la imitación, especialmente de las figuras más cercanas, sus padres y madres, u otros miembros de la familia con los que convivan. Por ello, estarán muy pendientes de lo que haces.
De esta forma, quejarte de tu cuerpo o criticar el peso de otra persona frente a ellos es una conducta que debes evitar a toda costa, ya que le estarías dando un pésimo ejemplo.
2. Celebra la diversidad corporal
Enséñale a tu hijo que no existe un único ideal de belleza.
En cambio, muéstrale la belleza que existe en todos los tipos de cuerpo con naturalidad. Demuéstrale que en la diversidad está la riqueza y las numerosas posibilidades de ser únicos e irrepetibles.
3. No hables de dieta o ejercicios para bajar de peso
En lugar de ello, enséñale a comer sano y de forma balanceada. Olvídate de la regla ‘plato vacío’ y permíteles decidir dejar de comer si ya se sientes satisfechos.
De igual forma, incentívalo a que haga ejercicio, pero no para bajar de peso, sino para crecer fuerte y saludable.
4. Habla de tus hijos y de otros enfocándote en sus cualidades y capacidades
No los definas por su cuerpo o habilidades físicas, sino más bien por su personalidad y las virtudes sociales o emocionales que estos tienen.
Tampoco dejes que otros lo hagan. Vecinos, médicos o maestros también pueden tener actitudes y comentarios negativos sobre el cuerpo, pues igualmente forman parte de esta estructura.
5. Fomenta la confianza corporal sobre la marcha
A pesar de tus esfuerzos, es inevitable que tu hijo haga preguntas o comentarios relacionados con el cuerpo, pues recuerda que está sometido a estos mensajes en sus diferentes espacios de socialización.
Habla sobre ellos y encuentra la raíz de estos pensamientos para que puedas hacerle cambiar de parecer centrándote nuevamente en sus rasgos de personalidad positivos y restándole importancia a los atributos físicos.
Estos algunos de los consejos para fomentar la confianza corporal desde la infancia que te recomendamos seguir en casa con tus hijos.
Recuerda que, como padres, tenemos la responsabilidad de educar a nuestros hijos, no solo para que se sientan a gusto con su cuerpo, sino para que reproduzcan en sus vidas este paradigma.